Seishi Yokomizo es un reconocido novelista de misterio y thriller de Japón, que alcanzó una gran popularidad durante el período Showa. Nacido en Kobe, Hyogo, Yokomizo desarrolló un interés por las historias de detectives cuando era niño. En 1921, mientras trabajaba en el Daiichi Bank, publicó su primera historia en la popular revista "Shin Seinen" (New Youth). A pesar de su intención inicial de heredar la droguería de su familia, el amor de Yokomizo por la literatura lo llevó a mudarse a Tokio en 1926, donde comenzó a trabajar para la empresa Hakubunkan. Después de desempeñarse como redactor jefe de varias revistas, renunció en 1932 para dedicarse a escribir a tiempo completo.
La escritura de Yokomizo estuvo influenciada heavily por la ficción histórica, especialmente por las novelas de detectives históricas. Su primera novela, "Onibi", se completó en 1934 y se publicó en 1935, aunque partes de ella fueron censuradas por las autoridades. A pesar de enfrentar dificultades durante la Segunda Guerra Mundial para publicar su trabajo, la popularidad de Yokomizo se disparó poco después del final de la guerra. Publicó muchas de sus obras en forma seriada en la revista Weekly Shonen Magazine de Kodansha, comenzando con "Honjin Satsujin Jiken" (El asesinato en el Honjin) y "Chōchō Satsujin Jinken" (La familia Inugami) en 1946. Los trabajos de Yokomizo se convirtieron en el modelo para la escritura de misterio posguerra japonesa, y ganó el apodo de "el John Dickson Carr japonés" debido a su admiración por el escritor.
La creación más famosa de Yokomizo es el personaje del detective privado Kosuke Kindaichi, que ha aparecido en muchas de sus obras. Muchas de sus novelas han sido adaptadas a películas, y es ampliamente considerado como uno de los mayores escritores de misterio de Japón. Yokomizo murió de cáncer colorrectal en 1981 y está enterrado en el cementerio Seishun-en en Kawasaki, Kanagawa.