Mark Alpert es un autor estadounidense de novelas de thriller, también conocido por su trabajo como editor contribuyente en Scientific American. Alpert tiene la habilidad especial de explicar ideas científicas complejas a los lectores, haciendo que conceptos como universos paralelos y dimensiones extra sean fáciles de entender. Teje estas ideas científicas en sus novelas de thriller, aclarando tecnologías y teorías reales.
Alpert es un entusiasta de la ciencia de toda la vida con una gran pasión por la astrofísica. Obtuvo su licenciatura en astrofísica en la Universidad de Princeton y escribió su tesis de grado sobre la aplicación de la teoría de la relatividad a un universo hipotético con solo 2 dimensiones espaciales, que fue publicada en el Journal of General Relativity & Gravitation.
Después de graduarse de Princeton, Alpert ingresó al programa de escritura creativa en la Universidad de Columbia, donde obtuvo una Maestría en Bellas Artes en poesía en 1984. Comenzó su carrera periodística como reportero de un pequeño pueblo en el Claremont Eagle Times y más tarde pasó a trabajar para el Montgomery Advertiser. En 1987, se convirtió en reportero de Fortune Magazine, donde escribió sobre la industria informática y tecnologías emergentes.
Durante la década de 1990, Alpert trabajó como freelance, contribuyendo con artículos a Popular Mechanics y escribiendo copia de conducción para el programa Moneyline de CNN. También comenzó a escribir ficción, vendiendo su primera historia corta, "My Life with Joanne Christiansen", a Playboy en 1991. En 1998, Alpert se unió al consejo de editores de Scientific American, donde editó artículos destacados para la revista y escribió una columna sobre sofisticados gadgets de alta tecnología. Esto reavivó su amor por la ciencia y escribió su primera novela, Final Theory, sobre Albert Einstein y la histórica búsqueda del holy grail de la física, la Teoría de Todo. La novela fue publicada en 2008 y fue elogiada como uno de los mejores thrillers del año por Booklist, Borders y la Asociación de Libreros Estadounidenses. Los derechos cinematográficos de la novela fueron adquiridos por Radar Pictures, una empresa de producción de Los Ángeles.